Lactancia artificial y caries

Hace no mucho, (o eso creo, porque el tiempo para mi es muy relativo.) os hable de la higiene bucodental de bebes y como la lactancia materna no es cardiogénica, aunque te encuentre profesionales que así te lo aseguren.

¡Pero la lactancia artificial… hay querida! Eso cambia un poquito, aunque la base es parecida, te explico:

La leche de formula como tal y por ser leche de formula NO causa caries (¡ojo! Hay leches de fórmula que tienen azúcar añadido y hasta con extracto de vainilla las he llegado a ver. pero vamos a suponer que la leche de formula que tu has elegido para tu criatura no es de estas) el problema esta en que los bebes que toman biberón suelen consumir mas alimentos en el vive además de la leche, ¿Qué a que me refiero? ¡A los temidos cereales! Esos cereales que son azuquítar puro y que no sirven para prácticamente nada en la dieta de nuestras criaturas.

Los bebés acostumbrados a dormirse con el biberón en la boca tienen más riesgo de sufrir caries en los dientes de leche, y mas aun cuando es en el último biberón del día cuando solemos añadir los cereales, por el falso mito de que si el biberón de la noche es más “contundente” él bebe dormirá mejor.

¿Y como pueden prevenirse las caries? Pues con una buena higiene bucal que debe de comenzar SI o SI, cuando erupcione el primer diente (y esto es para todos, tomen lactancia materna o artificial). Siempre con pasta dental fluorada de entre 1000 y 1450 ppm.

También es importante que en el biberón NUNCA SE OFREZCA nada que no sea leche, ni zumos ni cereales ni papillas…. ¡Solo leche!

La dieta del peque es muy importante también, si, aunque demos una leche adecuada, ofrezcamos bien el biberón y lavemos estupendamente los dientes. El niño se pasa el día comiendo azucares o alimentos con alto contenido en azúcar… pues el resultado va a ser el mismo.

Y es muy importante que la primera visita al odontopediatra sea entre los 6 y 12 meses de vida.
Además, también es recomendable que a partir del año los chupetes y biberones vayan desapareciendo de forma paulatina de la vida del niño.