Chupete fuera, ¿cuándo?

La evidencia es clara el chupete tiene que ir fuera a partir del año o para mí es más sencillo colocarlo cuando aparecen los molares en los niños que hay veces que puede estar en torno a los 18 meses y que sea un proceso paulatino además lo imprescindible es que el niño no lleve chupete una vez que cumple los 3 años. Como ves es un margen muy grande para que se pueda hacer una cierto, retirada del chupete totalmente respetuosa paulatina y focalizándonos en sacaleches qué momentos el niño realmente necesita el chupete o el niño lo pide por pura inercia.

Para empezar, tiene que quedar muy claro que la necesidad de succión de un niño menor de 3 años es real y natural el problema del chupete es que acarrea una serie de consecuencias tanto a medio como a largo plazo negativas para la salud bucodental del niño.

Además de poder acarrear otras consecuencias como pueden ser problemas a nivel muscular de la musculatura facial o a nivel de habla.

¿Y cuál es el método que yo recomiendo?

Lo primero de todo hablarlo con el niño y explicárselo de una manera natural y clara y como para todo lo que tiene que ver con un cambio de hábitos marcar unos límites muy claros, pero con unas expectativas reales; ¿y a qué te refieres Mari? Que no puedes pretender que tu hijo en 3 días deje de utilizar chupete cuando lo usa hasta dentro de la bañera.

Así que lo primero de todo tendrás que poner un límite claro y solo se podrá utilizar el chupete cuando realmente es necesario o tú como madre consideras que tu hijo lo necesita; véase para dormir, para ir en el coche hoy en momentos puntuales como puede ser el pediatra o algo relacionado con la salud.

Es interesante por poner límites a la hora de los espacios en los que el niño puede usar el chupete sí por ejemplo el chupete es solo para dormir el chupete solo tú se utilizará en el dormitorio donde dormimos.

Y como siempre os digo no estamos evitando rabietas estamos tomando decisiones como los adultos responsables que somos y acompañaremos a nuestro hijo eso enfado y frustración por este tipo de decisiones, totalmente entendible.