¿Y cómo ofrezco cereales?
¡Ay mari los cereales! ¿pero cómo os puede resultar tan complicado de introducir un grupo de alimentos tan simple cómo son los cereales. Aunque realmente lo tengo claro, nos han inculcado que los bebés y los niños necesitan los cereales ultra procesados que nos venden en todos los supermercados y que es la única forma de dar cereales a nuestros hijos. Pero nada más lejos de la realidad, si tú no tomas cereales en ese formato es porque realmente no son necesarios. De hecho, así no estamos enseñando a nuestros hijos cómo se comen los cereales de una forma real y natural.
Siempre que venís a una primera consulta y os digo que no hay que dar ese tipo de cereales, abrís mucho los ojos y me decís y cómo voy a dar cereales a mi hijo.
¡Pues exactamente igual que los comes tú! sí que es verdad que el plato de Harvard nos dice y nos deja claro que el 25% del plato de cada comida principal deberá estar formado por cereales y tubérculos, pero cereales y tubérculos reales no unos polvos que nos venden como sustitutivos.
¡A tu hijo puedes darle arroz, pasta, quinoa, mijo, sémola, pan! exactamente igual que comes tú.
Al igual que tú desayunas tostadas y ahí estás comiendo cereales, tu hijo puede hacer lo mismo; al igual que tú comes pollo con arroz al mediodía tu hijo puede hacer lo mismo o igual que tú haces un bizcocho y te lo tomas para merendar con un café tu hijo puede hacer y debe hacer lo mismo.
Además, como recomendación general tanto para tu hijo como para ti siempre que utilicéis harinas lo ideal es que las utilicéis integrales ya que tienen toda la fibra intacta tanto para la pasta el arroz o todo lo que utilices a nivel de cereales.